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Métodos de control

Control biológico

La caparreta blanda está controlada de forma natural por sus enemigos naturales, principalmente por la acción de los parasitoides del género Metaphycus. Es común encontrar caparreta blanda parasitada en el campo, con un aspecto más abombado y color miel.

Parasitoides

El parasitoide Metaphycus flavus es el principal enemigo natural de la caparreta blanda y el responsable de su control biológico junto con: Metaphycus helvolus, Microtery nietneri, Encyrtus aurantii y Coccophagus sp., si bien, los parasitoides de este último género pueden actuar como hiperparasitoides de los primeros.

Depredadores

Aunque se desconocen algunos depredadores generalistas como las crisopas y algunos coccinélidos específicos de cóccidos como Exochomus quadripustulatus y Chilocorus bipustulatus podrían alimentarse de las ninfas de caparreta blanda.

Control químico

Tratamiento recomendado

La caparreta blanda está controlada de forma natural por sus enemigos naturales y no causa daños en nuestros cítricos. En caso de ataques evitar la presencia de hormigas. En caso de realizar tratamiento se aconseja:

Clasificación modo de acción (IRAC) Materia activa Plazo seg.
UNM Aceite de parafínico *
7C piriproxifen 30
23 spirotetramat 14
4A Acetamiprid 14
4C Sulfoxaflor 7

El esquema de color empleado para cada producto pretende visualizar los distintos modos de acción en los que basar las rotaciones para el manejo de las resistencias.
Recomendaciones:

  • En caso de tener que realizar más de una aplicación se debe alternar entre las materias activas con distinto modo de acción, con el fin de evitar la aparición de resistencias.
  • Los plaguicidas deben utilizarse a las dosis recomendadas para evitar la aparición de resistencias o pérdida de eficacia de la aplicación.
  • Todas las aplicaciones químicas deben realizarse con equipos previamente calibrados. Se debe considerar el uso de un adecuado volumen, presión y velocidad de aplicación, de manera que se asegure una apropiada cobertura vegetal.
  • La técnica de aplicación debe permitir alcanzar bien el envés de las hojas, procurando una buena cubrición de éstas en todas las plantas. Para las aplicaciones en pulverización es aconsejable la utilización de mojantes.
  • Realizar los tratamientos sobre focos, si están bien delimitados.